Entre las actuaciones desarrolladas se encuentra la llevada a cabo en el propio aparcamiento del embalse. “Había problemas de drenaje de las aguas y fue preciso renovar esta zona y la carretera en este punto, y también arreglamos la pasarela de acceso a pie, que presentaba desgaste por el paso del tiempo”, concretó Tomé. En el embalse se procedió también a la colocación de la cruz de San Andrés, reponiendo la estructura para unir las vigas.
De igual modo, y con un presupuesto de 32.400 euros, la institución provincial actuó en dos carreteras en las que se venían detectando problemas de drenaje del agua, lo que dificultaba la circulación en los días de lluvia. Se trata de la LU- P-1010, que conecta A Touza con A Granxa, pasando por la presa de Os Peares, y de la LU- P-1001, que une los núcleos de la Barrela y Os Peares, pasando por Castro.
En el caso de la primera, la LU- P-1010, a la altura del kilómetro 2,7 existía un problema de drenaje de las aguas pluviales, por lo que fue preciso reperfilar las cunetas del aparcamiento del pantalán de Os Peares y hormigonarlas. A su vez, se realizó la canalización de las aguas y se renovó el firme de ese espacio.
En la LU- P-1001, entre los puntos kilométricos 16,385 y 16,770, se realizó una limpieza de cunetas, que después se hormigonaron para que el sistema de drenaje sea el más eficaz posible.
Según el presidente de la Diputación, “estas actuaciones reafirman el compromiso y las prioridades del gobierno provincial con la mejora de las comunicaciones y la seguridad vial en la provincia. Una red de carreteras en buenas condiciones es fundamental para el desarrollo rural, ya que acerca servicios y permite fijar población”.
